• El americano de 23 años es el nuevo campeón del mundo de los 100 metros tras lograr la sexta mejor marca de todos los tiempos en una carrera perfecta.

Aunque el Mundial de Atletismo de Doha no parecía ser es escenario idóneo para encontrar un heredero a la altura de Usain Bolt, Christian Coleman se ha empeñado en desterrar todos los prejuicios para opositar a un lugar en el olimpo de los velocistas.

Los 9.81 con los que aterrizó en tierras asiáticas y la falta de competidores a su altura, a excepción de un Odururu, que no compareció en las series, no parecían augurar una gran marca, pero el de Atlanta lo hizo posible, dando buena muestras de su extraordinaria calidad.

En una de las situaciones más esperpénticas vividas en un Mundial de Atletismo, con el estadio Khalifa semivacío mientras se disputaba la final de los 100 metros, Christian Coleman ocupó su lugar en la historia logrando unos sensacionales 9.76, la sexta mejor marca de todos los tiempos.

Fue una carrera idílica para el americano que corrió prácticamente solo desde el inicio tras una salida fulgurante, donde solo necesitó 128 milésimas para comenzar a volar.

El gran mérito de Coleman fue su capacidad para mantener la velocidad y lograr un registro que lo sitúa entre los mejores de la historia, pese a que apenas tuvo oposición entre los finalistas.

Los 9.76 de este atleta de 23 años lo situán solo por detrás de Usain Bolt, Tyson Gay, Yohan Blake, Asafa Powell y Justin Gatlin, quien, pese a pasar por tiempos a la final, consiguió la plata, su novena medalla en un Mundial de Atletismo, deteniendo el cronómetro en 9.89, todo un éxito que da continuidad a su oro en Londres 2017.

Mientras, el canadiense André De Grasse, con una marca de 9.90, se hizo con el bronce aventajando al sudafricano Akani Simbine (9.93) y al campeón en 2011, Yohan Blake. De esta manera, el norteamericano consuma su regreso a la élite del hectómetro tras sus bronces del Mundial de Pekín y los Juegos Olímpios de Río de Janeiro.

Con su triunfo en el Mundial de Atletismo de Doha, Christian Coleman se consolida como el elegido en los 100 metros para asumir el difícil relevo de Usain Bolt, dejando en el olvido las polémicas sobre dopaje, que pese a haber sido descartadas por la USADA, seguían pesando sobre su figura.

El registro logrado en el Khalifa Stadium le sitúa en un extraordinario punto de partida para acercarse al todavía estratosférico 9.58 del jamaicano, el cual todavía parece inalcanzable para un Coleman, al que le aguarda mucho margen de mejora.

Tras ganar en los 100 metros, la duda es comprobar de qué será capaz en los 200, donde intentará consolidar su papel de estrella en este Mundial de Atletismo de Doha, con un doblete que se antoja muy complicado ante el domino de Noah Lyles (19.50) en la distancia.