Cuando va a arrancar una nueva temporada futbolístisca los nervios y las emociones están a flor de piel. Tengas la edad que tengas, nada ni nadie es capaz de quitarse esa ilusión que supone ver por primera vez en el nuevo curso a tu equipo jugar. Sientes ese cosquilleo de amor incalculable que tantos meses llevas esperando. Cuando vuelves a tu estadio, cuando celebras un gol, cuando la victoria te alegra una semana entera…
Todas y cada una de estas emociones, ya sean individuales o colectivas, es lo que tiene LaLiga. Esa competición que durante 38 jornadas te mantiene en una montaña rusa de sentimientos.
La Liga 18/19 se presenta, como todas, con ilusión e incertidumbre. Va a ser la primera vez en muchos años en la que no va a estar Cristiano Ronaldo, ese portentoso goleador que hará que el campeonato español no sea lo mismo. No lo será, entre otras muchas cosas, porque no va a existir ese pique constante y atractivo con Leo Messi. El Real Madrid, sin duda, tendrá que reinventarse.
Tampoco hay que olvidar que el FC Barcelona ha perdido la magia de Andrés Iniesta, pero aún así los culés vuelven a ser los grandes favoritos al título. Un trofeo en el que habrá que tener muy en cuenta tanto al Atlético de Madrid, flamante supercampéon de Europa, como al Valencia. Dos conjuntos que se han reforzado extremadamente bien para poder competirle de tú a tú a cualquiera, tanto en LaLiga como en la Champions League.
Barça, Madrid, Atleti y Valencia, a priori, parecen estar un peldaño por encima del resto, aunque nunca se sabe qué puede pasar cuando el balón eche a rodar. Y eso es lo más bonito del fútbol.
Ninguno de ellos podrá estar tranquilo porque por detrás vendrán apretando fuerte escuadras como la del Sevilla o el Villarreal, habituales en los puestos altos de la tabla. Mención especial merece el Real Betis de Quique Setién, que tras una magnífica pasada temporada, está reforzando todas las posiciones de un equipo que echará de menos a Fabián Ruiz.
A estos hay que añadir que en los últimos años la lucha por Europa ha crecido mucho, y hay que meter de pleno en la pelea al Celta de Vigo, a la Real Sociedad o al Athletic Club, sin descartar a Espanyol, Getafe, Éibar y cualquier sorpresa que pueda haber. Entre ellos, destacar al Girona, que el curso pasado fue una de las revelaciones del torneo y a un Leganés que está haciendo muy bien las cosas y que ha ingresado 15 millones por Diego Rico.
La incógnita mayor la centran, como casi siempre, los tres recién ascendidos: Rayo Vallecano, SD Huesca y Real Valladolid; teniendo también en cuenta el rendimiento que darán el Levante, que está invirtiendo los 30 millones que ha recibido por Lerma, y el Alavés del ‘Pitu’ Abelardo, que ya le dio un cambio radical a los suyos para lograr la permanencia hace unos meses. 20 equipos, 38 jornadas y la misma ilusión en el año I Después de Cristiano.