- El piloto español, junto a Lucas Cruz, consigue su tercera victoria en el Dakar tras una gran actuación en la segunda semana de carrera. En motos, Ricky Brabec acaba con la hegemonía de KTM
Mucho se habla y se ha hablado sobre la vuelta a los orígenes del Dakar: que si más arena, que si más terreno abierto, menos caminos, complicaciones con el road book… Pero lo que no ha cambiado es la velocidad a la que se corre.
Seguimos hablando de minutos, escasos en la categoría de coches, y no de cuartos de hora o medias horas como ocurría en la carrera original. Pese a ello, y tras una segunda semana con, de nuevo, terreno muy variado pero sobre todo arena y dunas, éxito de este capítulo tercero de la prueba más dura del mundo del motor.
Sainz y Cruz sentencian el Dakar entre arena y dunas
Y éxito también para España, que ha vuelto a dar mucho que hablar en el Dakar. Y lo ha hecho, especialmente, en la categoría de coches en la que Carlos Sainz y Lucas Cruz conseguían su tercera victoria, dejando la prueba sentenciada en la penúltima etapa en la que consiguieron la victoria parcial y una ventaja de casi 18 minutos respecto a su más inmediato perseguidor, Nasser Al-Attiyah (Toyota) y unos 12 minutos con su compañero de equipo Stephane Peterhansel (Mini), quienes completaron el podio final de la edición 2020 del Rally Dakar.
Decimos ‘sentenciada’ porque la competición entre los tres gallos del corral fue prácticamente al segundo durante cada etapa. Pero la dupla española, que venía cuajando un Dakar muy sólido, pero sin poder poner demasiado terreno de por medio con sus rivales (la diferencia con el piloto de Toyoya no superaba la decena de minutos), dominó esa décima etapa, plagada de arena y dunas, haciendo gala de una excelente navegación y grandes dotes para la carrera. No en vano, tanto Peterhansel como Al-Attiyah se perdieron, dejando bien a las claras las complicaciones de la jornada.
Sainz y Cruz solo tuvieron que mantener la renta de 18 minutos que le sacaban tanto al catarí como el francés, en dos últimas etapas de nuevo muy consistentes, para erigirse en los ganadores del primer Dakar disputado en Arabia Saudí y, además de conseguir el triplete de victorias, se unen al selecto club como ganadores de tres touaregs con tres marcas diferentes (Volkswagen, Peugeot y Mini).
Como decíamos antes, Al-Attiyah y Peterhansel les acompañaron en el podio. Gran actuación del español Alex Haro, debutando como copiloto de Giniel De Villiers (Toyota), acabando quintos tras una primera semana con altos y bajos, justo por delante del local Yazeed Alrajhi (Toyota) y justo por delante de Orlando Terranova (Mini), quienes completaron la nómina de favoritos.
Por detrás, toca hablar, por supuesto, de Fernando Alonso y Marc Coma. En el debut en el Dakar para el uno y el debut como copiloto en coches para el otro, la pareja hispana ha completado una excelente actuación. Rozaron el triunfo en la octava etapa y pese al espectacular vuelco al inicio de la novena y los problemas que supuso, completaron una segunda semana muy sólida, minimizando errores y acabando entre los mejores de la especialidad. Finalmente, Alonso y Coma finalizaron como mejores rookies en la decimotercera posición.
Por detrás, genial actuación de Óscar Fuertes y Diego Vallejo (SangYong) logrando su mejor posición en el Dakar (25º) con Nani Roma y Dani Oliveras quienes han pasado un auténtico calvario para llevar a su novedoso Borgward a la meta Qidiyya en un Dakar usado a modo de ‘test’ de cara al futuro. Jesús Calleja y Jaume Aregall (Toyota) finalizaron en la posición 30ª con Cristina Gutiérrez y Pablo Huete (Mitsubishi) en el puesto 42. Pablo Cantó y el argentino Facundo Jatón (Toyota) fueron 52º, Joan Font y Borja Rodríguez finalizaron 54º mientras que Manolo y Mónica Plaza (Mitsubishi) acabaron en el puesto 55º.
La fortaleza de Brabec y Honda acaba con la hegemonía de KTM
En la categoría de motos, la emoción fue menor que en los coches debido, principalmente, a la fortaleza y constancia de Ricky Brabec y de todo el equipo Honda: Al fin, tras 18 años hegemónicos por parte de KTM, la marca nipona logra su objetivo de hacerse con el Dakar.
Y lo han hecho a base de trabajo, ilusión y trabajo en equipo. Porque llevaban a un equipo más competitivo que nunca a la prueba saudí, porque la moto ha mostrado una robustez y fiabilidad nunca antes vista y porque Ricky Brabec ha ganado demostrando una fortaleza y un dominio de la carrera tremendo.
Prácticamente no ha fallado en ningún momento, ha sido el más regular y constante y ello le ha valido para hacerse con su primer touareg. La ventaja de veinte minutos obtenida sobre sus perseguidores en la primera semana le ha valido para mantener distancias y alcanzar la gloria.
Al igual que Pablo Quintanilla (Husqvarna), quien se ha mostrado muy regular y sin apenas errores, pero los minutos que fue cediendo en la primera semana le han pasado factura. De los veinte minutos que perdía tras la sexta etapa con Brabec, el chileno solo ha podido recuperar cuatro. Toby Price (KTM), también lastrado por la pérdida de tiempo durante la primera semana, completó el podio. Por detrás, José Ignacio Cornejo (Honda) se consolida como uno de los grandes pilotos del momento mientras que Matthias Walkner (KTM) completó el top 5.
Por detrás, Luciano Benavides (KTM) también se coló entre los grandes favoritos, justo por delante de Joan Barreda (Honda). El castellonense mostró una regularidad poco vista en ‘dakares’ anteriores y solo las caídas durante los primeros días y el problema en las costillas le han alejado de la lucha por la victoria. Finalmente se alejó de la lucha por el podio tras ceder media hora en la penúltima etapa luego de haberse impuesto en la jornada anterior. El cambio de motor le penalizó y le alejó aún más de los puestos de cabeza.
En cuanto al resto de españoles, espectacular actuación del debutante Jaume Betriu (KTM), quien acabó 14º y mejor rookie de la edición. Dentro del top 20 finalizaron dos dakarianos de gran experiencia como Juan Pedrero (KTM) en la posición 16º y Laia Sanz (GasGas), quien tras una dura caída en la primera semana, problemas con la moto y con el ritmo de la carrera, logró completar su décimo Dakar en el puesto 18º. Fausto Mota (31º), Pep Más (69º), Ignacio Sanchís (83º), Rachid Al-Lal Lahadil (85º), Sara García (86º), Javier Vega (87º), Eduardo Iglesias (94º) y Javier Álvarez (95º) fueron el resto de españoles que completaron la prueba. En la categoría ‘Original’, en la que los pilotos corren sin ningún tipo de asistencia externa, incontestable triunfo del rumano Emmanuel Gyenes (KTM) con el español Al-Lal Lahadil (KTM) finalizó 21º en la categoría.
Quads: Casale domina y consigue su tercer triunfo
Entre los quads, no hubo sorpresas e Ignacio Casale (Yamaha) logró su tercer triunfo en el Dakar. El chileno pudo dosificar y controlar la renta conseguida en la primera semana y acabó venciendo por delante de las Yamaha de Simon Vitse y Rafal Sonik. El español Tony Vingut (Yamaha) se vio obligado a abandonar tras sumar varias etapas con muchos problemas.
Camiones: No hay quien pueda con los rusos
En la categoría de camiones, dominio de placer de los Kamaz que lograron el triunfo con Andrey Karginov, vencedor en 2014, con Anton Shibalov en segunda posición. Siarhei Viazovic (MAZ) fue el único capaz de enfrentarse a los camiones rusos, pero tuvo que conformarse con la tercera plaza. Ales Loprais (Tatra) y Martin Macik (Iveco) completaron el top 5. Los primeros españoles clasificados fueron Ferrán Marco y Marc Torres, junto al andorrano Albert Llovera (Iveco) en la 15ª posición. Por su parte, gran Dakar para el mítico tridente de MAN formado por Jordi Juvanteny, José Luis Criado y Xavier Domenech, quienes terminaron en la posición 19º y como primer 6×6 de la categoría. Alberto Herrero y Julio Romero (MAN) finalizaron también la prueba en la posición 29º.
SxS: Hinojo y Puras brillan entre los buggies
Y por último, en la categoría de SxS, el equipo Monster Energy Can-Am logró al fin el éxito entre los buggies gracias al gran ritmo del americano Casey Currie. Tanto Reinaldo Varela como Gerard Farrés completaron una gran labor de equipo en esta segunda semana, yendo incluso los tres vehículos juntos en muchas etapas, con la intención de amarrar la victoria. En cuanto a los españoles, gran actuación de José Antonio Hinojo y Diego Ortega (Can-Am), quintos, tras una carrera muy regular y fiable durante todas las etapas. Justo detrás, en la sexta plaza, finalizaron Jesús Puras y Xavier Blanco (Can-Am), cuajando una carrera de menos a más. Por su parte, Santi Navarro y Marc Solá (Can-Am) acabaron dentro del top 10, seguidos de Gerard Farrés y Armand Monleón (Can-Am), undécimos tras un desafortunado Dakar. Juan Miguel Fidel (Can-Am) fue 15º, José Luis Peña y Rafa Tornabell (Polaris) acabaron 22º y Eduardo Blanco, copiloto de Antonio Marmolejo (Can-Am) finalizó en el puesto 26º.
El Dakar se tiñó de luto
Como no, mención especial para Paulo Gonçalves. El piloto de Hero, uno de los más experimentados y queridos de la caravana del Dakar, fallecía a los 40 años de edad en la séptima etapa tras una caída. Sin duda, una gran pérdida para el mundo del motor que lloró su muerte durante la octava etapa, cancelada para motos y quads en señal de luto.
El portugués afrontaba su 13ª participación en un equipo modesto pero con la ilusión de convertirse en una marca importante en la competición más dura del mundo del motor. Gonçalves ha pasado por algunas de las mejores marcas del mundo como KTM u Honda, siendo tanto mochilero como jefe de filas. No en vano, en 2015 alcanzó la segunda posición con la marca nipona. Descanse en paz.