Del 25 de este mes hasta el 8 de junio tendrá lugar una nueva edición de una de las citas más prestigiosas del mundo del tenis: Roland Garros, que se disputará sobre la tierra batida de París.

Pero ¿quién era ese hombre que ha dado nombre al primer Grand Slam de la era Open? Lejos de lo que muchos piensan, este francés nacido en Saint-Denis en 1888 poco tiene que ver con el mundo del tenis, más allá de practicarlo como aficionado. De hecho, es famoso por sus hitos dentro del sector de la aviación y pasó a la posteridad por lograr -en 1913- llevar a cabo la primera travesía a través del Mediterráneo en 5 horas y 53 minutos, a bordo de su Morane-Saulnier, y a pesar de que el motor sufrió una avería en Córcega. Con cinco litros de gasolina sin consumir aterrizó en Bizerta in extremis. Fue todo un pionero que aplicó sus técnicas para lograr cuatro victorias durante la Primera Guerra Mundial (1914-1918), donde era piloto militar aéreo. A él se le debe el sistema para disparar las ametralladoras a través de la hélice del avión.

Roland Garros fue derribado por los alemanes, quienes lo hicieron prisionero sin poder destruir su avión. Los germanos querían estudiar su sistema y después mejorarlo sincronizando el disparo de las ametralladoras con el paso de las palas de la hélice. El francés, un héroe para los galos, no se rindió y logró huir, aunque en 1918 terminó su vida tras fallecer en un combate en las Ardenas. En la actualidad se le recuerda dando nombre a este estadio, construido en 1928 para la defensa del título francés en la Copa Davis de ese año, tan en auge en aquel momento gracias a los Mosqueteros. Un estadio también con mucha historia, ya que, además de albergar torneos tenísticos, se utilizó durante la Segunda Guerra Mundial como campo de concentración de disidentes políticos y de muchos judíos que posteriormente fueron transportados hacia otros centros. Uno de los más famosos reclusos fue el escritor húngaro Arthur Koestler, quien relató su experiencia allí.

Volviendo a lo deportivo, quien este año puede hacer historia es Novak Djokovic. El serbio está dispuesto a ponerle las cosas difíciles a Rafael Nadal sobre la arcilla francesa y lo viene demostrando en sus últimos partidos. El más reciente tuvo lugar en Roma, donde el balcánico desplegó su mejor juego para imponerse a un balear de piernas cansadas y presentar su candidatura a Roland Garros, donde tratará de evitar que Nadal alce su novena copa. Nole quiere hacerse por fin con el último grande que le falta en sus vitrinas para completar el Grand Slam y retornar a lo más alto de la clasificación de la ATP.

Tras su victoria en Roma, Djokovic tiene todas las papeletas para recuperar el primer puesto de la clasificación mundial, que llegó a ocupar durante 101 semanas en dos etapas diferentes. Llega con una desventaja de 650 puntos pero con la ventaja de tener que defender solo la semifinal alcanzada el año pasado (720 puntos) por el título que impide sumar (2.000 puntos) a su más inmediato rival. La victoria en Roland Garros supondría su séptimo ‘grande’, el primero en Francia y el título que le haría completar el Grand Slam. Solo repetir título le aseguraría al manacorí seguir como número uno sin depender de terceros.

Marta R. Peleteiro.